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El Daiquirí es un excelente cóctel con nombre de playa cubana que todo barman debe conocer, también los que practican la coctelería en casa
El Daiquirí es un cóctel que toma su nombre de una playa cubana, situada en la costa sur del oriente cubano, aproximadamente a 30 Km al este de la ciudad de Santiago de Cuba. Está rodeada de colinas que, junto al mar tropical, sus caletas y los pinos, presentan una vista acogedora para cualquier visitante.
Quizá por ese ambiente tropical, Giacomo Pagliuchi, un ingeniero minero de origen italiano por entonces capitán del Ejército Libertador, se le ocurrió bautizar con este nombre a esta preparación, cuando la probó en la casa del americano Jennings Cox, quien improvisó una bebida para sus invitados cuando se quedó sin Ginebra. En esta entrevista de Giacomo Pagliuchi y Jennings S. Cox se discutía cómo rescatar unas minas en la región de El Cobre, donde ahora se encuentra la Basílica de la Patrona de Cuba.
El Daiquirí es un cóctel que toma su nombre de una playa cubana, situada en la costa sur del oriente cubano.
Cox le añadió zumo de limón y azúcar para mejorar el sabor del ron local y terminó consiguiendo una mezcla que alcanzaría una gran aceptación. Como no encontró Gin o Vermouth en la despensa, mezcló solo ron, azúcar y limón, ingredientes excelentes para mitigar la sed y el calor de Cuba.
La bebida no alcanzó popularidad hasta 1909, cuando el almirante Lucius W. Johnson, un médico de la marina de los Estados Unidos, la probó y la introdujo en el Club del Ejército y de la Marina, de Washington, DC. En 1913, la idea que surgió en Santiago de Cuba viajaría a La Habana, gracias a Emilio González, cantinero de origen español que trabajaba en el hotel Plaza. Este lo popularizó en la capital y, a su vez, lo transmitió a su amigo Constantino Ribalaigua (Constance), para entonces propietario del Floridita.
Daiquirí en la actualidad
Desde esa época la combinación se ha ido enriqueciendo y transformando hasta finalmente convertirse en el Daiquirí Frappé que buscan en el Floridita muchas personas de cualquier parte del mundo.
El 19 de julio de 2017 En Cuba se celebró el Día Mundial del Daiquirí. La festividad estuvo motivada por la inclusión de esta preparación en la cartera de cócteles clásicos de la International Bartender Association el 1.º. de febrero del propio año. De esa forma se declaraba al daiquirí como uno de los cócteles representativos de Cuba.
Hemingway hace mención del cóctel daiquirí en alguna de sus novelas y dijo: “Esta bebida no puede ser mejor, ni siquiera parecida, en ninguna parte del mundo”.
Con la misma frase con la que Ernest Hemingway inmortalizó al mojito, marcó la historia del daiquirí en el Floridita. El escritor estadounidense hace mención del cóctel daiquirí en alguna de sus novelas y dijo: “Esta bebida no puede ser mejor, ni siquiera parecida, en ninguna parte del mundo”. En la actualidad existe una representación suya de bronce y enfrente servido, esperándolo, un fresco daiquirí. Hemingway, en su novela Islas en el golfo, identifica con el sobrenombre de Constante a esa figura legendaria entre los cantineros cubanos y rey indiscutible de los cocteles.
El Floridita, la cuna del daiquirí
El inicio del bar El Floridita, ubicado en la esquina de Obispo y Monserrate, se remonta a principios del siglo XIX, momento en el que solo era un bodegón típico de la época donde se servían bebidas tradicionales. Desde aquel momento tuvo siempre una gran afluencia de público, debido a su ubicación estratégica en La Habana Vieja. En aquel entonces se conocía como La Piña de Plata.
En 1915, el lugar pertenecía a Serafín Parera Coll, un emigrante catalán que había hecho fortuna en México; pero en uno de sus viajes falleció en la capital cubana y lo heredó a sus sobrinos, y fue Narciso Sala Parera (1879-1953), el mayor de ellos, a quien le correspondió la administración de la inesperada fortuna familiar, de cierta importancia en el año 1918.
Estatua de Ernest Hemingway en El Floridita.
La Piña de Plata, después nombrado El Café, por la familia Sala pasó a denominarse Café Restaurante La Florida, edificio que fue reconstruido en 1989 siguiendo los planos de su arquitectura original, con una conocida barra de madera de caoba maciza. Constante Ribalaigua Vert, un joven de Lloret de Mar —ciudad natal de la familia Sala—pasó muy pronto de aprendiz a ocuparse en exclusiva del bar y, en especial, de la preparación de las bebidas que se servían a los clientes. En el año 1935 El Floridita cambia de dueños y Constante Ribalaiagua Vert y sus herederos fueron los socios mayoritarios hasta su nacionalización por las autoridades cubanas en la década de 1960.
Las paredes del restaurante están decoradas con murales, simulando estar rodeado por astilleros de la época, con una vista de la iglesia de Regla. La Revista Esquire en 1953 reconoció El Floridita como uno de los siete bares más famosos del mundo. En 1992 se le concedió el Premio Best of the Best Five Star Diamond Award de la Academia Norteamericana de Ciencias Gastronómicas como el Rey del Daiquirí y Restaurante especializado en pescados y mariscos más representativo.
El bar El Floridita es uno de los más concurridos en La habana Vieja.
En El Floridita, en el año 2012, se elaboró el primer daiquirí gigante, compuesto por 275 litros, y se han realizado las VIII ediciones del Rey del Daiquirí, competencia de coctelería en la que participan cantineros de todas partes de Cuba y del mundo. En el 2018 fue la sede del concurso de coctelería Rey de Reyes, en el mes de octubre, en el que competieron los ganadores de las ediciones anteriores por el título de mejor elaborador de Daiquirí del mundo. Después de tres jornadas eliminatorias, el cubano Adrián Ravelo, bartender del Hotel Habana Libre se coronó “El Rey de Reyes”, con el cóctel bautizado como Bella Doncella.
La Junta Directiva de la Academia Iberoamericana de Gastronomía declaró a La Habana como la Capital Iberoamericana de la Coctelería 2018, designación que tuvo lugar en Buenos Aires en el mes de septiembre de 2017 y que contó por vez primera con la presencia del presidente de la Cátedra Cubana de Gastronomía y Turismo, Jorge Méndez.
Para preparar un Daiquirí
Ingredientes:
Azúcar blanca
Hielo en trozos
Jugo de limón ½ limón
Marrasquino 5 gotas
Ron Havana Club carta blanca 3 años
Preparación: Mezcle el azúcar con el jugo. Cuando el azúcar esté disuelta añádale el ron. Mezcle en una coctelera la mezcla de ron, azúcar y jugo de limón. Sírvalo en una copa de cóctel llena de hielo picado.
Existen otras modalidades del daiquirí:
1) Daiquirí Hemingway (1939), unos dicen que Constantino fue su creador, otros que Antonio Mielan, pero según se documenta ambos trabajaron pensando en el cóctel: Constantino le hace la propuesta a Hemingway una tarde, Heminway probó la mezcla, pero la prefirió sin azúcar, doble de ron y con toronja.
2) Daiquirí Natural (1898), pasa de la mina al hotel Venus de Santiago de cuba, en el año 1905 según la IBA, creado por Jennings Cox y popularizado por Maragato, quien muere el 30 de junio de 1940, con más de 50 años detrás de la barra.
3) Banana Daiquiri (1974), es americano.
4) Daiquiri Mulata (1970), creado por José María Vázquez.
5) Daiquirí frappé: en 1917, la batidora logra su entrada al bar y hace de El Floridita uno de los bares más famosos del mundo.
