Los Mossos han desmantelado una destilería ilegal de whisky ubicada en un almacén de Badalona y han detenido al presunto responsable, al que las principales empresas de este tipo de bebidas consideran como uno de los máximos expertos en estas falsificaciones, informó hoy la policía autonómica.
En ese almacén de Badalona y en otro de Sabadell, los Mossos han recuperado cuatrocientas botellas de marcas de whisky falsificadas (JB, Ballantine’s y Cutty Sark, Beefeater), doscientas de las cuales estaban a punto de ponerse a la venta, así como diferentes enseres para destilar, manipular y falsificar estas bebidas alcohólicas.
La policía ha detenido a José G.P., de 60 años y vecino de Badalona, con diferentes antecedentes por falsificación, estafa y delitos contra la propiedad industrial y considerado por las marcas afectadas como el mejor falsificador de sus productos, según las mismas fuentes.
De hecho, los Mossos explicaron que los peritos de las marcas de whisky falsificadas ‘en algunos casos dudaban inicialmente de si efectivamente se trataba de whisky adulterado o de material original’.
El detenido contactaba primero con trabajadores de diferentes bares y establecimientos de ocio, que le vendían las botellas vacías con los precintos fiscales originales y sus cajas.
Después, compraba en grandes superficies comerciales botellas de whisky de muy baja calidad y bajo precio, agua destilada y alcohol, materiales con los que adulteraba el whisky barato y conseguía una graduación similar a la del original.
Finalmente con diferentes enseres totalmente artesanales rellenaba las botellas de whisky falsificadas, las cerraba nuevamente con tapones nuevos y precintos falsificados y las comercializaba como productos de producción paralela, sin facturas, con un precio por debajo del mercado legal.
Los Mossos continúan investigando para determinar si se puede implicar en la cadena de distribución a diferentes bares o locales de ocio, ya que ‘colocar’ estas bebidas adulteradas a los clientes era relativamente fácil a determinadas horas de la noche.
Aunque en principio el consumo de este whisky adulterado no comportaba ningún peligro para la salud, los Mossos esperan los resultados de los análisis de las botellas por si además se puede imputar al detenido un delito contra la salud pública.
